Pienso que ya se para donde va este autor, siento que todo va enfocado hacia la felicidad, hacia la grandeza que puede adquirir nuestro espíritu, y yo que anteriormente dije que no existía nada que nos enseñara a ser felices. Me retracto de lo que dije antes de leer este capítulo, después de todo, errar es humano.
Ahora sí, retomando la Ética. Después de todo lo que nos ha dicho Savater, ahora nos dice imbéciles, (me incluyo porque considero que el saco me queda). Para la Ética, los imbéciles, son aquellas personas que van por la vida, confundidas; creyendo que son o que quieren tal o cual cosa, cuando en realidad no tienen ni idea de los errores que están cometiendo. Pero, ¿Qué creen? Tenemos la cura para esa imbecilidad moral, es la conciencia, y para lograr esa conciencia debemos tener solo cuatro cosas. Primero, debemos tener amor por la vida, o sea, muchas ganas de vivir. Segundo, analizar si lo que hacemos es realmente lo que queremos hacer. Bueno, yo creo que es algo así como la vocación o lo que nos hace sentir felices y satisfechos. Tercero, debemos practicar la moral, todas esas órdenes y costumbres que la sociedad nos inculca. Cuarto, debemos dejarnos de pretextos que solo sirven para no hacernos responsables de nuestros actos. Si somos inteligentes, nos daremos cuenta de, que para lograr esa buena vida humana; no solo necesitamos a los humanos, también tenemos que responsabilizarnos por lo que hacemos, porque son nuestros actos los que nos forman y sus consecuencias las que nos transforman., en humanos o monstruos. Como ya mencione antes, somos los arquitectos de nuestro propio destino. Nosotros mismos decidimos…… ¿Qué queremos ser? Unos mediocres, unos fracasados o personas triunfadoras, todo depende de qué clase de imbécil seamos.
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